Las kilocalorías son la unidad de medida del contenido de energía presente en los alimentos, aunque habitualmente nos referimos a ellas como calorías. Pero, ¿qué significa la expresión “calorías vacías”? Cuando hablamos de que un alimento tiene “calorías vacías” nos estamos refiriendo a que aporta grandes cantidades de energía pero ningún o casi ningún nutriente, como las vitaminas o los minerales.
En una dieta saludable se busca un equilibrio en el balance energético, es decir, que el total de calorías consumidas sea proporcional a las calorías quemadas. Además, esta energía debe ir acompañada de los nutrientes necesarios para cubrir las recomendaciones nutricionales y asegurar el buen funcionamiento del metabolismo y del organismo. Por tanto, podemos decir que debería haber un equilibrio entre los nutrientes y la energía comprendida en los alimentos de nuestra dieta para asegurar un estado de salud óptimo.
Las calorías vacías no promueven este equilibrio, pues lo único que conseguimos es un exceso de energía que almacenaremos en forma de grasa en el organismo, fomentando el aumento de peso y, a la vez, un posible déficit nutricional de vitaminas y minerales que tendrá repercusiones en la salud, como por ejemplo, anemia a causa de una falta de hierro.
Una buena herramienta para mantener una dieta saludable y evitar ingerir calorías vacías es la pirámide saludable. Los alimentos del vértice son los que contienen más calorías vacías, y por lo tanto se recomienda evitarlos o consumirlos de manera ocasional. Entre estos alimentos encontramos: refrescos azucarados, dulces, helados, golosinas, etc. Reduce su consumo, así como el consumo de bebidas alcohólicas o de azúcar refinado, y sustitúyelos por alimentos más saludables.
Te damos las bases de una alimentación saludable
- Toma cereales, a poder ser integrales pues tienen más fibra, vitaminas y minerales. Estos son pan, arroz, pasta, muesli, cuscús, harinas…
- Consume dos raciones de verduras y hortalizas (1 ración=150-200g) y tres piezas de fruta diarias.
- Ingiere alimentos proteicos como carnes y embutidos magros, pescados (procurando que dos días a la semana sea pescado azul), huevo y legumbres. Estas últimas tienen un perfil proteico muy saludable si se combinan con cereales.
- Toma entre 2 y 4 raciones de lácteos semidesnatados o desnatados diariamente. Una ración equivaldría a un vaso de leche, dos yogures o 80g de queso fresco.
- Usa aceite de oliva virgen para aliñar o cocinar tus platos. Toma un puñado de frutos secos como nueces cada día o cada dos días.
- Reduce el consumo de sal y grasas saturadas escogiendo productos con un contenido reducido en estos nutrientes: por ejemplo, ElPozo BienStar ofrece alternativas bajas en sal y grasas saturadas, para disfrutar del sabor sin renunciar al equilibrio.
- Bebe entre 6 y 8 vasos de agua También puedes beber infusiones, caldos o licuados.
- Procura escoger alimentos diferentes entre sí y de temporada para darle variedad a la dieta.
En resumen, al potenciar una dieta equilibrada estás evitando el consumo de calorías vacías y la probabilidad de sufrir descompensaciones nutricionales o energéticas. Súmate a un estilo de vida saludable, ¡disfrutarás de una mayor salud y bienestar!