Cuidado de la piel desde el interior con la alimentación

La piel es el órgano más grande del cuerpo y es la encargada de proteger el organismo de factores externos. Es por ello que el buen cuidado de la piel se ha convertido en un factor muy determinante de la salud en general y cada vez tenemos una mayor consciencia de ello.  Debemos  cuidarla y mantenerla en forma. Normalmente cuidas la piel desde fuera; la proteges del sol, la hidratas, la cubres de los frí­os vientos, la masajeas… Estos cuidados son esenciales para que se vea bonita, pero también es imprescindible cuidar tu piel con alimentos desde el interior.

¿Cuáles son los nutrientes más importantes para el cuidado de la piel?

Las proteí­nas

Desempeñan la función de formación y reparación de los tejidos. Las podrás encontrar en la carne, en los productos BienStar, el pescado, las legumbres y los huevos.

Los ácidos grasos

Que están presentes en el pescado azul, los huevos, el aguacate, los frutos secos y las semillas de lino son de gran ayuda para evitar la sequedad.

Las vitaminas también son importantes para cuidar la piel y tenerla bien nutrida. Las más relevantes para el cuidado de la piel son:

  • La vitamina A o retinol, presente en los lácteos, los huevos y el pescado azul. La provitamina A o betacaroteno, que se encuentra en vegetales y frutas que presentan colores amarillos, naranjas y rojos. Algunos de los vegetales son la zanahoria, el tomate, las espinacas, las acelgas o los pimientos y algunas de las frutas son la papaya, el albaricoque, el melocotón, las cerezas o la sandí­a.
  • Las vitaminas del grupo B, caracterí­sticas de los vegetales de hoja verde, los cereales, los huevos, las legumbres o los productos lácteos.
  • La vitamina C, presente en los cí­tricos, las fresas, el kiwi y los frutos rojos. Y, también, en el brócoli, las espinacas, las coles de Bruselas o el pimiento rojo, si están poco cocidos.
  • La vitamina E o tocoferol, caracterí­stica del aceite de oliva y de girasol, o de los frutos secos como las nueces, las avellanas o las almendras.

En lo que a minerales respecta, destacan el selenio, el zinc, el cobre y el hierro. El primero, presente en las lentejas, las judí­as, la avena, las pipas de calabaza y las nueces del Brasil, tiene acción antioxidante. El segundo se encuentra en la ternera, las espinacas, las setas, el cacao, las pipas de calabaza y las semillas de sésamo, y participa en la formación de colágeno. El tercero, el cobre, permite al organismo utilizar la tirosina, un aminoácido que influye en la pigmentación de la piel. Éste se halla en los cereales integrales y sus derivados, así­ como en vegetales verdes. Finalmente, el hierro, interviene en la palidez de la piel y está presente en los granos enteros, las espinacas, las leguminosas y los alimentos de origen animal.

Y, ¡que no se te olvide! También es fundamental mantener la piel correctamente hidratada, bebiendo unos 8 vasos de agua al dí­a. El aspecto de la piel está influido por la alimentación, el estilo de vida, el estrés y el sedentarismo, así­ que te aconsejamos llevar una vida saludable. ¡Construye unos buenos pilares básicos en tu interior, para que desde el exterior se vea la piel estupenda! Si quieres mejorar tus hábitos, no te pierdas el Plan bienestar, con un test para valorar tu estilo de vida y trucos para potenciar tu mejor versión.

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