A la hora de cuidarnos muchas veces nos olvidamos de nuestra piel, pero nuestra belleza comienza con un buen cuidado de nuestro rostro. Pero, cuidar la piel no sólo es cuestión de estética, sino que es importante para proteger nuestra salud. Al fin y al cabo, la piel es el órgano más grande del cuerpo y es la barrera de protección de nuestro entorno.
No hay fórmulas milagrosas ni nada que se le parezca a la hora de tener un rostro saludable, y lleno de vitalidad, sólo es cuestión de constancia. Existen una serie de pasos básicos y fundamentales que debemos seguir, aunque sea muy difícil tener un momento libre en tu día a día. Debes ser paciente y disciplinada para mantener tu rutina durante el máximo tiempo posible.
Por ello, aquí queremos ofrecerte una serie de rutinas imprescindibles que te ayudarán a cuidar la piel de tu rostro, y que te permitirán lucir el aspecto que deseas.
¿Por qué crear una rutina de belleza para tu rostro?
Para que un tratamiento de belleza realmente funcione debes mantenerlo en el tiempo ¿por qué? Si no tenemos esa constancia acabaremos comprando productos sin ton ni son, y los aplicaremos de forma irregular, con lo que no veremos todos sus beneficios. Manteniendo una rutina sólo tendrás que adquirir aquellos productos que necesites ¡no los tirarás sin utilizarlos! Además, aprenderás a utilizarlos, lo que te permitirá ser una experta, y los manejarás más fácilmente.
Una correcta rutina de belleza te permitirá ahorrar tiempo, dinero y esfuerzo. Pero existen otras muchas razones para instaurarla en tu vida cotidiana:
- Disfrutarás de un momento de intimidad y conexión contigo misma, dándote tu tiempo.
- No pondrás inconvenientes para realizarla en cualquier situación, incluso en el baño de la oficina.
- Interiorizarás los pasos, y en unas semanas sólo necesitarás 5 minutospara acabarla.
- Mejorarás tu imagen personal. Tu piel lucirá más joven y radiante.
Rutinas de belleza para tu rostro que debes realizar cada día
Antes de comenzar tu rutina, no debemos olvidar hidratarnos, y para ello lo más importante es beber agua, sobre todo a primera hora de la mañana. Ten en cuenta que, después de haber dormido durante 8 horas sin tomar nada de agua, tu organismo está en un estado cercano a la deshidratación. Te recomendamos que te acostumbres a tomar 2 vasos de agua nada más levantarte de la cama y, posteriormente, sumar un vaso más cada 2 o 3 horas. Ahora sí, vamos a contarte cuáles son las acciones que debes hacer en tu día a día para que tu cutis luzca radiante y lleno de vitalidad.
1. Limpieza
Me atrevería a decir que es de los pasos más fundamentales. Al limpiar la cara eliminamos todas las impurezas que se acumulan en la piel a lo largo del día. Tanto por las mañanas como por las noches hay que limpiar el rostro. Lo ideal es hacerlo con un limpiador especial para tu tipo de piel, aunque, si no es posible, opta por enjuagarla solo con agua tibia y una toalla suave.
Debemos tener cuidado de no secar la piel en exceso para no dañarla. Por eso es bueno aplicar un tónico para equilibrar nuestro pH después de la limpieza.
2. El contorno de ojos antes de maquillarte por la mañana
Si estás cansada, probablemente el primer sitio en el que se note sea en tus ojos. Y, si no te preocupas de tratarlas adecuadamente, acabarán convirtiéndose en bolsas que te costará mucho eliminar.
Solo tienes que poner un poco de contorno de ojos en la yema de tus dedos, y extenderlo sobre la ojera y el párpado superior. Te dará luminosidad en la mirada, una de las zonas más sensibles.
3. Los sérum faciales
Posteriormente, llegará el turno del sérum facial. Se trata del producto cosmético ideal para nutrir la piel del cutis. Al aplicarlo, da pequeños golpecitos sobre la piel, pero no frotes con demasiada fuerza.
4. Ya estamos en la mitad de nuestra rutina: la hidratación
Ahora llega el momento de ponernos la crema hidratante que nos aporta nutrición, sin olvidar hidratar el escote.
Debes incorporar la crema hidratante dando un ligero masaje que permita estimular la hidratación y que penetre el producto. Recuerda que durante el invierno debemos hidratarnos más intensamente.
3. Antes de salir de casa, un poco de protector solar
De nada te servirá todo lo anterior si sales a la calle sin usar un protector solar. Los rayos UVA y UVB no solo pueden quemarte, sino también provocar la muerte de las células, acelerar el envejecimiento de la piel y provocar la aparición de manchas.
4. Exfoliar una vez a la semana
La piel del cutis genera constantemente nuevas células que desplazan a las muertas. Sin embargo, a estas a veces les cuesta desprenderse, lo que puede ocasionar que se obstruyan los poros con la consiguiente aparición de puntos negros, o el temido acné.
Nuestro consejo es que utilices una mascarilla facial exfoliante que puedes elaborar a partir de productos naturales.
Como habrás podido comprobar, establecer rutinas con las que cuidar la piel facial es más fácil y rápido de lo que parece. Sólo debes parar 5 minutos, darte un respiro y cuidar tu piel, tu pelo, o permitiéndote hábitos de vida saludables. Tu cuerpo y tu salud te lo agradecerán.