En verano nos gusta refrescarnos en la playa, la piscina, lagos, ríos, parques acuáticos… y nos gusta estar bronceados, pero hay que protegerse del sol, ya que puede dañarnos la piel si nos exponemos sin tomar precauciones. Hoy te contamos algunos consejos para que te protejas de los rayos ultravioleta.
Ponte protector solar para los rayos ultravioleta
Aplicarte protección solar antes de exponerte al sol es esencial para cuidar tu piel de los rayos ultravioleta. Escoge una crema solar con un factor protector de 30FPS o superior, sobre todo si vas a exponerte al sol en las horas contrales del día, es decir de las 10h a las 16h aproximadamente.
Aplícate la crema solar una media hora antes de salir de casa y renuévala al menos cada 2 horas. Si te bañas mientras llevas el protector solar, es recomendable aplicarte crema otra vez con la piel seca para asegurar la protección, aunque el protector sea resistente al agua.
Si estás en la montaña, piensa que el sol te llega más de cerca, cosa que debes tener en cuenta en el momento de elegir una crema, debe tener un factor de protección más elevado y tienes que aplicarte con más frecuencia.
Recuerda que bajo la sombra de un parasol también calan los rayos ultravioletas, por lo que la protección solar es necesaria igualmente. Llevar un sombrero o una gorra y unas gafas de sol también pueden ayudar a resguardarte y evitar quemarte el cuero cabelludo y la cara.
Pon crema en tu piel después del sol
Después de exponerte al sol es muy importante que hidrates tu piel con una loción hidratante para después del sol. Empieza por ponerte una loción hidratante después de la ducha, ya que con el agua y el vapor calientes los poros están más abiertos y, esto facilita la absorción de la crema por parte de la piel.
Las lociones hidratantes especiales para después de la exposición solar tienen un efecto de hidratación, calmante y reparador de la piel en general. Hoy en día se pueden encontrar una gran variedad de este tipo de cremas y puedes escoger la que más se adapte a tu piel.
Alimentos que ayudan al cuidado de tu piel
Cuando nos exponemos al sol, la piel sufre un gran estrés, se resiente y necesita regenerar células para reemplazar las que se han deteriorado. A través de la alimentación puedes ayudar al cuidado de la piel consumiendo alimentos ricos en antioxidantes, ya que estos son beneficiosos para la regeneración celular de la piel por los rayos ultravioleta.
Puedes escoger alimentos ricos en nutrientes antioxidantes como la vitamina C, A, B2, B3, la biotina y el zinc. Estos están, sobre todo, en frutas y verduras verdes, anaranjadas y rojas, como el melón los frutos rojos, los cítricos, el melocotón, el pepino, las espinacas, la zanahoria, las judías verdes…
Hidrátate correctamente
En verano, la evaporación de agua a través de la piel es más elevada, y si además expones tu piel al sol, la temperatura de tu piel aumenta de modo que se evapora más agua. Es muy importante que tu piel esté muy bien hidratada cuando te expones al sol, no sólo con lociones hidratantes, si no que esté hidratada desde dentro. Cuando el cuerpo no esta correctamente hidratado, la piel puede sufrir quemaduras más graves.
Una botellita de agua para hidratarte por dentro es un imprescindible en tu bolsa de la playa o la piscina. Puedes congelar una parte para que se mantenga fresquita más tiempo. El agua tiene que ser la bebida principal, pero también puedes beber infusiones o tés fríos sin azúcar, bebidas vegetales, aguas saborizadas o smoothies con frutas y verduras y algún de frutas y verduras.
¡Disfruta de tus días de piscina y de playa con protección para los rayos ultravioleta! Si quieres mejorar tus hábitos, no te pierdas el Plan bienestar, con un test para valorar tu estilo de vida y trucos para potenciar tu mejor versión.