Parece mentira pero, después de un mes intenso de abundantes comidas, cenas familiares, fiestas con amigos y de empresa… llega el momento de volver a la rutina, con nuestros hábitos diarios y horarios.
Además, esta fecha es perfecta para incluir nuevos hábitos y llevar un estilo de vida más saludable, ya que supone un nuevo comienzo tras el parón navideño.
¿Quieres saber cómo llevarlo a cabo? ¡Sigue leyendo!
Alimentación saludable y deporte; la combinación perfecta
Llevar un estilo de vida saludable es la clave para conseguir nuestros objetivos y sentirnos cada vez más saludables. ¿Quieres dar lo mejor de ti mismo? La clave está en combinar una alimentación saludable y una rutina de deporte.
Existen múltiples maneras de volver a empezar una rutina saludable. Coge papel y boli y apunta estos tips:
Hidratarse: Puede sonar redundante, pero el agua es imprescindible para la salud y nos ayuda a eliminar toxinas, así como transportar minerales y vitaminas por nuestro cuerpo, entre otros.
Alimentos saludables: Procura que al menos en dos comidas incluyas fruta y verdura, ya que son alimentos ricos en nutrientes y con múltiples beneficios para nuestra salud.
Planifica tus comidas: Hacer un plan semanal con antelación nos ayuda a mantener una alimentación saludable en el tiempo. Además de ahorrar horas en la cocina y dinero, conseguirá que tengas tu alimentación más ordenada y consciente.
Actividad física: Vuelve o comienza una rutina de ejercicio físico de manera gradual, para evitar lesiones y manejar la frustración. No es necesario llevar a cabo una actividad extrema, con volver a retomar los ejercicios que realizabas antes poco a poco. Salir a andar de manera diaria marcará la diferencia en tu estado de ánimo y físico. Ponerse un objetivo personal puede ayudar a tu motivación y superación personal.
Descanso y rutina de sueño: Establecer un horario de sueño es importante para obtener un buen descanso y regeneración muscular.
Snacks Saludables: Una muy buena forma de llevar una alimentación saludable es tener a mano snacks saludables como pueden ser frutas, frutos secos o yogur.
Apoyo social: Comparte los objetivos que tienes propuestos con amigos o familiares ayuda a que el proceso sea más motivador.
Metas realistas: Establece metas realistas y que sean fáciles de alcanzar a largo plazo, en vez de optar por soluciones rápidas y que no sean tan buenas para la salud.
Relajación: Encuentra huecos para tener tu momento de relajación, ya que esto te puede ayudar a reducir el estrés y mejorar tu bienstar general.
Recuerda que para cumplir el objetivo de volver a la rutina saludable en cuanto a alimentación y ejercicio físico, es necesario empezar poco a poco de manera progresiva y siendo constantes. Si queremos introducir estos hábitos de forma radical, podemos tener un mayor riesgo de lesión y más frustración de no cumplir los objetivos.
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